En la Hípica Pegaso los caballos y ponis viven en prados en semilibertad donde tienen espacio tanto para comer como para relacionarse entre ellos, cubriendo así la necesidad que todo equino necesita, pertenecer a una manada.
Creo que encerrar a un caballo en una cuadra es privarle de ser caballo, privarle de interactuar con sus congéneres, de poder decidir por él mismo si busca comida, agua o quiere tumbarse a descansar. Estar entre cuatro paredes es solo por comodidad del humano, de tenerle en un sitio donde cogerle rápido, donde controla que coma, lo que él diga, la cantidad que él diga y a la hora que él diga. El caballo deja de sentir libertad por lo que cuando le deciden sacar fuera de la cuadra sale con exceso de energía (ya que no puede moverse cómo un caballo necesita), con miedo incluso del viento o los pájaros, y en cuanto está cerca de otros de su especie se comporta con mucha ansia y descontrol de emociones.
Disponemos de diversos prados donde tienen arboledas (fresnos, encinas y algún roble) donde guarecerse tanto del calor del verano como del frio del invierno, realizamos una rotación de los mismos no dejando que los caballos apuren en exceso la hierba para que pueda crecer con mayor rapidez en el tiempo de descanso que les damos. Realizamos una recogida de estiércol y posterior abonado del terreno. El agua se suministra diariamente o bien de los pozos de las fincas o a través de un remolque con deposito de agua. Suministramos piedras de sal y alimentación extra en caso de ser necesario por escasez de pasto (pienso compuesto y heno).
Existen dos tipos de pupilaje:
- Pupilaje con uso compartido con la Hípica 170€
En este tipo de pupilaje el caballo se podrá usar para las actividades que se realicen en la hípica siempre que el propietario no requiera de estar con su caballo, teniendo él prioridad por ello existirá una comunicación previa para dejar el caballo sin utilizar para la hípica.
- Pupilaje exclusivo para el propietario 200€
Aquí el caballo solo será usado por su propietario o personas que él deje autorizadas, la Hípica no dispondrá de este caballo para ninguna actividad. El propietario mantendrá una comunicación con la directora de la Hípica para saber cuando vendrá a estar con su caballo y cuando terminará su actividad para traer el caballo del prado y volverle a llevar.
En ambos casos si el propietario del caballo en pupilaje realiza actividades individuales sin ir la directora de la Hípica Pegaso como guía, no podrá entrar en el seguro de la Hípica por lo que el propietario deberá tener un seguro de accidentes personalizado. En el caso de querer dar una alimentación extra será asumido dicho gasto por el propietario.
En el precio del pupilaje que ofrecemos queda excluido el servicio de veterinario, del podólogo y el de recogida de cadáveres en caso de una desgracia. Pero si está la opción de atender a estos profesionales en caso de que el propietario no pudiera estar, así como realizar las curas que hicieran falta o dar medicación que necesiten. El propietario estará continuamente informado del estado de su caballo así como de la necesidad de llamar a un profesional u otro.
Para cualquier otro detalle sobre el Pupilaje de caballos no dudéis en contactar conmigo y estaré encantada de explicároslo.
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